Argentina fue el primer país en sancionar una ley contra la Trata de personas con fines de explotación sexual. El 23 de septiembre de 1913, el legislador socialista Alfredo Palacios impulsó la promulgación de la Ley N° 9.143, que visibilizó la más aberrante de violación de los derechos humanos de mujeres, niñas y niños, a quienes se los transforma en mercancía para el ejercicio forzado de la prostitución. Recién 86 años después, en enero de 1999, la Conferencia Mundial de la Coalición Contra el Tráfico de Personas, reunida en Bangladesh junto con la Conferencia de Mujeres, instauró el 23 de septiembre como el “Día Internacional contra la explotación sexual y la trata de personas”.