En Mujeres por los Derechos tenemos la enorme fortuna de contar con el apoyo de mujeres capaces, trabajadoras y generosas, que brindan su tiempo y su saber para que nuestros proyectos salgan adelante. Hoy queremos presentarles a tres de estas colaboradoras, y con esta publicación darles las gracias por todo lo que hacen por nuestro futuro.
Cada una de ellas ha tenido motivaciones diferentes --o no tanto-- para unirse a nuestra asociación. Cuenta Selene que le resulta imposible no empatizar con los relatos de vida de las sujetas que transitan la casita día tras día. Ve su participación como un desafío personal que la enriquece en cuerpo, mente y alma "porque me permite vincularme con realidades completamente diversas y diferentes a la mia". Georgina dice que se acercó a nosotras como tesista, y Belén, que quería sumarse a una red de intercambio y hacer un aporte. Como ven, no importa por qué vienen, sino por qué se quedan...
¿Y por qué se quedaron? ¿Qué querían lograr con su trabajo en Mujeres por los derechos? Belén se quedó con nostras para "amplificar las voces de las sobrevivientes, de las más vulneradas". Selene coincide con este objetivo: quiere "que se las vea y se las escuche", porque "es la mejor manera de garantizar sus derechos". Y Georgina, busca escuchar, aprender: "Ya me cambió todo el pensamiento, porque yo pensaba que era un trabajo que se elige, y a partir de conocer y escuchar a las chicas obviamente mi pensamiento cambió".
A partir de esos aprendizajes, de los que todas somos parte, nuestras voluntarias coinciden con nosotras en qué políticas públicas son necesarias para empezar a erradicar la idea de que la prostitución es un trabajo y reconocer que las personas prostituídas son victimas de violencias extremas. Belén piensa que es necesario implementar polícias de inclusión --social, educativa, económica-- que permitan avanzar hacia el logro de una autonomía. Selene cree necesaria la implementación de cupos laborales y el acceso a una jubilación, "dos sustentos económicos importantísimos para hacerle frente a las necesidades y a los derechos que se les han vulnerado durante tanto tiempo". Y Georgina también piensa que se necesitan política públicas que ayuden a incluir a las mujeres al mercado laboral para que salgan de las esquinas o de la situación de prostitución, que ayuden a sostener psicológica y emocionalmente ese proceso para que puedan sanar dicha situación de prostitución, "políticas para que las chicas puedan estudiar, puedan criar a sus hijos".
Estamos muy orgullosas y tremendamente agradecidas de que estas mujeres se hayan sumado a nuestra asociación. Ojalá vengan más, ojalá seamos cada día más mujeres que avanzan hacia un futuro de trabajo de verdad.
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