viernes, 22 de abril de 2022

Úrsula: "Sentí que se rompían las cadenas"

De mi infancia recuerdo que fue muy difícil, porque si bien tengo a mi mamá, ella nunca nos cuidó mucho, no nos llevaba a la escuela ni nada de eso. No había “trato de familia”. A mi mamá le daba lo mismo, porque siempre estaba enferma. Ella tenía un bebé detrás de otro, así que mi hermana y yo, las dos más grandes, nos ocupábamos de cambiar pañales y atender a los bebés. Como ella estaba enferma, yo siempre paraba en lo de una tía, o en diferentes casas, y me fui criando así. Fui violada a los 11 años y tuve mi primera hija a los 16. Mi mamá nunca nos hablaba de educación sexual, a eso lo aprendí después, junto a mi nena. No fue buena mi infancia. A los 16 años ya tenía a mi hija. Cuando fui conociendo otra gente pasaron muchas cosas feas: fui secuestrada, prostituida, y no estaba mamá, no estaba papá, así que bueno, trataba de llevarlo.


En el mundo de la prostitución entré muy joven. Conocí a una persona a los 20 años. Quedé embarazada y todo estuvo bien hasta que el nene cumplió un año. Después él empezó a decir que yo tenía que ir a “laburar” porque necesitábamos plata para la leche y los pañales. Después empezó a pegarme, me hacía conocer a sus amigos, a conocidos de él. Fui a parar a la calle, a ejercer la prostitución ahí. Pasó mucho tiempo. Con él estuve 16 años. Tenía que hacer plata o me golpeaba y me echaba.

Salí de la prostitución cuando me separé de él. Sentí como que se rompían las cadenas.

En el futuro quisiera enseñarles a mis nietas, hablarles, decirles lo que a mí no me enseñaron. En 2015 conocí a Elena en un encuentro en Mar del Plata. Me invitó un amigo, aprovechando que una asistente no podía ir y había un lugar libre. Fui, la conocí, me invitó a unirme a la Asociación y acá sigo. Me gustaría hacer lo que hace Elena, sacar a las chicas de esa situación, tener un espacio para ayudar a las chicas, hablar de este tema porque mucha gente ignora esta realidad. 


No hay comentarios.:

Publicar un comentario